Acerca del origen y destino de Betiana y las palabras

El día 6 de diciembre de 2007 envío desde mi casilla de correos el primer mailing con Palabras. El objetivo de este acto original fue hacer público un hecho que hasta entonces había sido de carácter privado, la escritura. Las respuestas fueron inmediatas.

El 12 de diciembre de 2007 envío la segunda Sección de texto. Por primera vez lo nombro Betiana y las Palabras en un acto de humorada. Mi formación y mi desempeño laboral son en el campo de la Imagen.

Desde entonces he realizado 48 secciones de Betiana y las Palabras, que he enviado en formato mail con entregas imprevistas y no secuencializadas en el tiempo, respetando los tiempos internos donde surgen las palabras y, escribiendo sobre la hoja de texto de Hotmail directamente, con la menor edición posible.

La intención es regalar Cartas Poema a cualquier usuario dispuesto a recibir una manifestación original en Palabras.

En estos casi dos años de trabajo, todas las Secciones de Betiana y las Palabras han tenido respuesta por parte de sus lectores. Algunas por identificación, otras por gusto estético y otras por preocupación. Considero a todas igual de bonitas.

El mailing se amplia permanente tanto con destinatarios de Argentina como de otros lugares del mundo. A muchos los conozco personalmente y a otros sólo a partir de Betiana y las Palabras.

Hoy el mailing es mayor al que Hotmail me permite dirigir en un solo día. Estoy experimentando la segunda humorada. La relación Poesía-Actividad Comercial.

El blog es el registro público de este proyecto y, porqué no, un medio para encontrar nuevos destinatarios para las Cartas
Poema.

Mi deseo con Betiana y las Palabras es nunca perder la necesidad de escribir.
Mi añoranza con Betiana y las Palabras es el papel en vivo y el puño y letra.
Mi presente con Betiana y las Palabras es aprender con cada escritura algo nuevo.
Mi trabajo con Betiana y las Palabras es que todo esto crezca tanto, y se manifieste tan puro y original, que reciba alguna vez una linda Impresión real.

Bienvenida/o y espero que disfrutes del proyecto,
Betiana Tkaczyk
28 de diciembre del 2009

martes, 29 de diciembre de 2009

Betiana y las palabras - Sección 48: licencias de navidad

licencias de navidad


Estimado Papá Noel,

he decidido escribirle.



A pesar de mi condición de incrédula,

hoy he sentido más miedo

a las palabras guardadas

que a las convicciones autosuficientes.



Una vez quise una bicicleta,

otra vez el barrenador,

el año de las películas mudas,

mi primer walkman con motor.

El diario íntimo de mi hermana,

la cartuchera doble piso de estación.

Abandonar los aparatos,

usar corpiño,

un pajarito multicolor.

El cassette de Michael Jackson,

brillitos para labios de importación.

La mochila de mochilero.

Vivir en la espuma de los días.

La pepona más grande que yo.

La caja doble piso de lápices color,

divisas para viajes,

amor.

El tatoo para mi cuello,

una cita con el padre de mis hijos,

la minifalda de cuero,

frutas de estación.

El disco de Margarito Tereré.

No arrepentirme de ninguna decisión.

Las baldosas de la cocina,

la voz de Heidi,

un perrito juguetón.

El equipo de la escuela,

sueños en los que esté mi abuelo,

llantas deportivas para el auto,

una esponja de arroz.

La matrícula de la segunda carrera,

todas las películas de Jarmush,

una moto cross.

El álbum de los Hermanitos Estrella,

la minipimer,

un mensajito en el que haya voz.

Un piercing para lengua que no duela,

los patines,

un cactus que no muera

y una publicación.



En vísperas de nochebuena,

he decidido tomarme todas las licencias

y dejarte en tu correo,

mi poema.



Adios Papá Noel.

Un afectuoso saludo crédulo,

para vos.



Enviado por correo electrónico los dias 24 y 25 de diciembre de 2009

Visitá http://betianaylaspalabras.blogspot.com/ , allí podés conocer el origen, desarrollo y mis deseos para Betiana y las palabras.
Sección 48: licencias de navidad
Betiana y las palabras
de Betiana Tkaczyk
betianca@hotmail.com
Argentina

lunes, 7 de diciembre de 2009

Betiana y las palabras - Sección 47: ironivivos

ironivivos




Un par es encontrar el fundamento
de lo que no está presente
en tu figura,
modelada con tu tiempo
tu esfuerzo
tus palabras
y tus acciones.

Un par es compartir la crueldad
amasijada con esperanzas,
visibles sólo en la libertad,
de vivir junto a aquello
que sabemos
nunca poseeremos de modo definitivo
y sin embargo
una y otra vez
gustaremos trabajar
para hacerlo a diario.

Otra cosa es la voluntad
el capricho
y el ego,
tan propios
tan diestros
tan útiles
tan underground de mala manera
que ni ganas de negociar
cuando se está tan propio...

Porque no soy única,
sino una impar entre las capas,
izando palabras sin cesar,
grito:
Seamos underground
de buena manera.

Porque quien puede
desde su par,
puede el mundo
hacia sí.

Y quien no,
que alargue su cuero lo que le dé,
que no discuta,
que asienta,
una y otra vez con su cabeza,
ironivivo.

Entonces la respuesta
está en tu necesidad
de pares o impares,
tu relación con la rutina
tu vínculo con la guerra
tu apropiación de la ambivalencia.

Que el miedo no opaque la verdad,
porque entonces tendré que bajar la cabeza,
ironiviva.

Y prefiero mirarte a los ojos,
una y otra vez,
sobre todo lo demás.

Si tengo que la guerra,
si tengo que la rutina,
si tengo que la ambivalencia,
sé que puedo hacerlo.

Pero prefiero tus ojos
que miro y no poseo
que miras y no posees
que brillan entre la velocidad
de lo que no será nunca certero
y sin embargo,
siempre será cierto.

Y no hablo sólo de un amor,
sino de todos
mires por donde mires.



Betiana y las palabras
Sección 47: ironivivo
betianca@hotmail.com
Enviado el 23-11-09

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Betiana y las palabras - Sección 46: purgatorio

purgatorio


Se me han ido mil poemas.
Desde entonces he sentido vacía
la resignación.


He aquí la espera,
mientras lo que sucede
no tiene acontecimiento.


Betiana y las palabras
Sección 46: purgatorio
Enviada el 10/11/09


sábado, 31 de octubre de 2009

Sección 17: mala prensa‏

Me gustan las libélulas

porque no mueren en un día,

porque son transparentes,

porque andan siempre de a dos,

porque son torpes,

por su sonoridad,

porque vuelan en cualquier altura.

Pero por sobre todas las cosas

me gustan las libélulas,

porque sólo se dejan ver

unos instantes antes

de una imperiosa tormenta;

aunque no gocen de la prensa

de una grácil mariposa.